Sequedad y atrofia vaginal
La atrofia urogenital, el único signo que presentan todas las mujeres menopáusicas en algún momento, puede conducir a una disminución de la tensión, lubricación y sensibilidad del área vaginal, provocando una menor satisfacción durante las relaciones sexuales y afectando la calidad de vida.
Se manifiesta con dolor o molestias durante las relaciones sexuales, lo que generalmente lleva a perder interés en las mismas, espaciándolas y generando un círculo vicioso que aumenta aún más la atrofia.
PhiLift aborda de forma efectiva un amplio rango de problemas que afectan el bienestar femenino. La sequedad y las infecciones vaginales recurrentes son tratadas mediante el rejuvenecimiento del tejido vulvo-vaginal, que mejora la lubricación de la vagina y normaliza su flora y pH. También PhiLift utiliza tratamientos con láser para mejorar la respuesta del sistema inmunológico local y ayudar a eliminar las infecciones vaginales crónicas.
El SGM (Síndrome genitourinario de la menopausia) se está convirtiendo en una preocupación cada vez mayor para las mujeres en todo el mundo. Según la Sociedad Norteamericana de Menopausia (North American Menopause Society), para el año 2025 se espera que la cantidad de mujeres postmenopáusicas ascienda a 1,1 mil millones, y más de la mitad posiblemente experimentará los síntomas vulvo-vaginales que afectan sus estilos de vida, emociones y vidas sexuales en forma significativa.
El cambio hormonal que ocurre con la menopausia puede causar que el revestimiento de la vagina se vuelva más delgado, más seco, menos elástico e inflamado. PhiLift rejuvenece el revestimiento vaginal, incrementando el espesor de las paredes y restaurando su lubricación natural. El tratamiento reduce los síntomas incómodos como picazón, ardor y fricción y ayuda a mejorar la función sexual.